lunes, 7 de febrero de 2011

ESTRUCTURA DISIPATIVA

Un edificio se afinca al suelo por una especie de armadura que le da sustentación. Esta armadura constituye  su estructura. En sentido figurado la palabra estructura también sirve para dar idea de cómo se compone la organización administrativa.

No obstante el edificio haya sido construido en base sólida y bien amarrada al suelo y la estructura administrativa tenga sido idealizada conforme a principios de organización universalmente reconocidos, todo ese gran aglomerado de ideas y materiales puede esparcirse en noticias divertidas o disiparse en algo insólito y artificial.

Estructura disipativa es un concepto que busca asociar las ideas de orden  y disipación. Lo hace considerando que la disipación de ideas y materiales, al alejarse de una situación de equilibrio estable, se convierte en fuente de orden y no desorden como popularmente sería presumido.

Un ejemplo, a camino de convertirse en clásico de la municipalidad, es el gobierno bipartito en el concello de Cee: independientes x PP – Independientes x Psoe. La piel de dos cuerpos de empatía repelente, al friccionarse continuamente en función de intereses culturales y lógica en la conducción de los destinos de una comunidad, producían cierta inestabilidad entrópica que, por atrito, se transformaba en calor latente de fusión. Es un fenómeno que jamás se produce espontáneamente. Nace de un diferencial entre extremos, unidos por un gradiente aparentemente lineal.

Las estructuras disipativas se sitúan en la base de las ideas que abordan el estudio de sistemas complejos. Se requiere previo conocimientos de nociones de no linealidad, fluctuación, bifurcación y auto-organización para dominar su comprensión. Un sistema abierto tiene la capacidad de ingresar energía del ambiente que lo rodea, al mismo tiempo le devuelve entropía que, como ya vimos en IMPREVISIBILIDAD, es una medida del desorden.

La entropía en un sistema abierto como el nuestro puede mantenerse estable o vivir decadente (entropía negativa). Ya en un sistema cerrado, como las listas partidarias absolutamente blindadas ante fuerzas externas, la entropía tiende a crecer hasta el máximo  nivel de equilibrio soportable, desde donde y a seguir se procesa un brutal e irreversible cambio de estado (guerra civil española, actualmente Tunez, Egipto y otros que vendrán)

Como  podemos concluir de lo expuesto, el orden en un sistema abierto solo puede mantenerse en condición de desequilibrio del sistema. En otras palabras, un sistema abierto necesita traficar recursos entre el sistema y el ambiente para que pueda sobrevivir y renovarse continuamente, esto es, necesita una estructura disipativa.

“A” tira calor del sistema y lo da a “B” para que este se caliente. “B” agradece el calor obtenido  y reparte u  poco con “A’ en condición de estado gradiente. “C” reconoce que el equilibrio alcanza el máximo nivel de su dinámica estable y mete la pata entrópica tirando de “A” el calor recibido de “B” y resfría un poco menos “B” para que este pueda mantener en buena temperatura la estructura disipativa del sistema.

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