Pues yo diría que para algunos haría falta un saco de moralejas para dar cobertura a todas las que cubren su rostro. Más que falta de respecto democrático, revela actitud indecente por parte de un paisano que debía defendernos. Insinúa que todos los gallegos somos tramposos y corruptos y se dejan dominar por un sistema absolutamente incompetente que necesita de globos sonda para escudriñar el voto del residente ausente y someterlo a la censura de “este sí, este no”, conforme la conveniencia del momento y el villano de plantón. Si es tan entendido en materia de colegio electoral, como se muestra desentendido en materia de la carta constitucional que regla todos los españoles, que hable serio por lo menos una vez y denuncie claramente los desatinos y los guardias corruptos que violan el voto sagrado de los esparramados paisanos en la emigración.
De momento, tengo una propuesta concreta y la ofrezco para que la tenga en consideración: por ocasión de elecciones nacionales le ofrezco una mula para que lo lleve de Ourense a Madrid y allí pueda usted votar de la misma manera que desea que vote la emigración. ¿Aun así, creerá usted que nadie hará trampa con su voto?
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